Desde el 29 de octubre del 2OO4, estar en Babia es pisar también una de las 46O reservas de la Biosfera que hay en el mundo. Y una de las veintesiete que hay España. Pero lo que realmente hace a Babia excepcional, su identidad, es ser un territorio profunda y sabiamente transformado por siglos de acción humana.
«Babia es uno de los paraísos botánicos de la cordillera Cantábrica».
Torre de Babia, cuyo nombre se debe probablemente a la torre que protegía el acceso a los ricos pastos de los puertos de la zona y de la cual podemos ver aún los restos a poca distancia del pueblo. Además de esto, de Torre de Babia se sabe que en su iglesia descansan los restos de algunos miembros de la familia Quiñones, señores de la zona durante años. En la Iglesia parroquial de San Vicente. El templo, sin duda el más importante de la zona, se enclava en lo alto de una loma y distanciado al sur del pueblo.
En el barrio alto de la localidad, sobre el valle del río Torre a 13OOm de altitud están las ruinas de una construcción fortificada que consta de una torre y dos dependencias de planta rectangular adosadas a la torre. El conjunto forma una residencia señorial que por su organización, fortificación y elementos arquitectónicos puede situarse cronológicamente en la baja edad media.
Jovellanos la describe como: “la Torre de Florez y la califica de - enorme - y de - fortaleza antigua y de factura romana - ” en su diario.
En Torre de Babia tenemos la posibilidad de realizar todo tipo de actividades: rutas de senderismo,escalada (con 8 picos que superan los 2OOO m de altitud), ski de fondo, bicicleta, rutas a caballo, incluso alguna cueva para hacer espeleología ...
La luz de Babia es sencillamente espectacular de hecho esta catalogado como uno de los mejores cielos del mundo para ver las estrellas.
Así mismo el pueblo cuenta con varios puentes romanos, dos molinos de agua, una fábrica de luz ...
La gastronomía es de gran calidad, predominando las carnes de la zona (resaltemos que los pastos también estan catalogados como de los mejores porque son básicamente calizos)
Saliendo del pueblo por el camino que parte del mismo en dirección norte, vamos ascendiendo suavemente las primeras elevaciones en dirección al macizo del Montihuero. En breve el camino desemboca en una majada amplia con un caseto de pastores en el medio y dando la sensación de perderse entre las rocas que comienzan a aflorar delante nuestro.
El Montihuero aparece enseguida, y podemos apreciar ya su impresionante pared norte, que sirve de contrafuerte a la cuenca sobre la que se asienta la Laguna de las Verdes, a 173O metros de altitud.
La Laguna de las Verdes
Esta es una laguna de origen glaciar, pequeño remanso de agua que da origen al arroyo de Torre. El nombre hace referencia a la vegetación acuática que en ella crece (lirios, orquídeas, anémonas...), siendo de tal variedad que se puede apreciar una gran gama de colores, sobre todo verdes. Nos daremos cuenta a poco que observemos la laguna, que existen zonas más o menos circulares en las que la vegetación no existe debido al agua que mana del fondo, en forma de surgencia proveniente de los neveros de las cumbres cercanas.